Las horas pasan son flores fuera de su tierra
tienes la lengua obligada de los jesuitas judíos
yo te veo camino al norte
camino a donde te parió tu madre
Eres esperanza y eras pasado, hoy
Sólo sabes que vas, no sabes por qué
tu memoria es un espantapájaros
tus oídos son ojos encarcelados
Te da vergüenza que vean tus zapatos
el barro bajo la suela está lleno de espinas
hojas deshechas de una Biblia quemada
Lo que queda de tus viajes no es mucho
unas pocas memorias, cerillas de Estambul
una jarra de Castilla, una boina de Madeira.